
La lista de juegos pendientes que se hace demasiado larga es algo por lo que todos hemos pasado. Y claro, vemos un juego que se ve interesante, lo agregamos al carrito y se nos olvida por completo a la semana siguiente. No solo ocupando espacio en el disco, sino permitiendo a Steam hacer un conteo de todos los juegos comprados en la plataforma y que no han sido probados ni una vez.
La cifra es abismal: 20 mil millones de dólares desperdiciados por procrastinadores u olvidadizos los cuales les sobra demasiado sueldo, quizas.

La estadística es más asombrosa cuando entendemos el detalle de que NO se trata de juegos probados por poco tiempo y desechados, sino de juegos que ni siquiera se han abierto una sola vez. Esto también habla de como la oferta de compras digitales, que teniendo precios inferiores a las versiones de consola, impulsan a los usuarios a comprar compulsivamente sin medir siquiera el tiempo libre que tendrán para probarlos.