Streets of rage 4 fue una de las mejores noticias que recibimos en 2020. Guard Crush Games colaboró con Dotemu para lanzar uno de los mejores beat’em up de la última década y ya de paso, resucitar a una de las franquicias más míticas de la historia de los videojuegos. Han pasado cinco años en un pestañeo y ahora la compañía nos trae Absolum, simple y llanamente una de las sorpresas del año. Del apartado artístico se han ocupado los genios franceses de Supamonks. El resultado es un roguelite, con influencia de Hades, que combina un estilo inconfundible con un vicio que no te dejará soltar el mando en semanas o incluso meses. A simple vista puede parecer un beat’em up más, pero añadir el género del roguelite ha sido todo un acierto. Cada partida es distinta, cada run trae nuevas habilidades y SIEMPRE, siempre, siempre descubres algo nuevo. Esto alarga la vida del juego y le añade una capa de estrategia que nos encanta. Supamonks Studio, fundado en París, se ha ganado un lugar destacado dentro del cine de animación europeo gracias a su estilo dinámico, su narrativa directa y una identidad visual marcada por el humor y la expresividad. Lejos de los moldes de las grandes productoras, el colectivo francés apuesta por una animación “de autor”, donde cada trazo y cada movimiento respiran la energía de quienes los crean. Obras como Salesman Pete o Batz revelan una combinación de maestría técnica y espíritu independiente, consolidando una estética que mezcla la ligereza del cartoon con la contundencia de la sátira social. En Absolum han sabido crear un mundo único, con una paleta de colores llamativa y un diseño de enemigos absolutamente brillante. Parece que estemos dentro de un cuento de dibujos animados del que no queremos despertar. La historia es la de siempre, el Rey del Sol, Azrla ha tomado el mando de Talamh, eliminando la magia de todo el reino. La historia se nos contará poco a poco, a través de puntitos brillantes repartidos estratégicamente por el escenario. Gracias a las misiones secundarias y a las rutas alternativas los más ávidos de conocimiento y los fans del lore se darán por satisfechos. Afortunadamente el juego nos ha llegado traducir al castellano con un gran trabajo de localización. Cuando se hacen bien las cosas también hay que decirlo.Pero aquí hemos venido a darnos de palos con todo lo que se mueve. Cuando empezamos solo tenemos dos ataques, un movimiento de esquiva y un ataque mágico que consume un poco de maná. Todo parece bastante simple pero está perfectamente pensado para que cada uno de los personajes jugables tenga un estilo combate realmente único. Estamos hablando de un juego que te pone las cosas realmente difíciles en el modo de dificultad normal. Si eres de los que sufres demasiado, te gustará saber que desde el menú del juego podemos personalizar en todo momento la cantidad de daños que infligimos y el que recibimos por parte de los enemigos. Podemos especializarnos en solo jugar con un jugador pero es algo poco recomendable proque cada uno de los jefes finales está pensado para ajustarse mejor a un determinado personaje. Tarde o temprano tendrás que aprender a jugar con todos, por lo que arremángate y ponte las pilas. El concepto del roguelite le pone picante a la receta y añade un poco de aleatoriedad mientras nos permite ir aprendido más y más cosas con cada run. No te preocupes si las primeras partidas son realmente cortas, porque poco a poco le irás pillando el truco y es algo que merece mucho la pena. Gracias al fulgor y a los orbes pronto podemos mejorar la eficacia de las habilidades, mejorar las habilidades arcanas. Por otro lado están los abalorios, objetos que aumentan temporalmente varias estadísticas. El roguelite es un arma de doble filo y también es justo hablar de la otra cara de la moneda. A algunos se les hará un poco repetitivo repetir las fases una y otra vez para terminar el juego con todos los personajes y ver los distintos finales. Por suerte tenemos la opción de jugar en cooperativo local o en línea. Uno de los jugadores creará una sesión temporal que se determinará en función del progreso de los dos jugadores. El máximo permitido durante estas partidas cooperativas es de dos jugadores. Absolum se ha consolidado como una de las grandes sorpresas del año. Lo que en un principio parecía un proyecto independiente más dentro del panorama europeo, ha terminado convirtiéndose en una experiencia audiovisual de enorme impacto, capaz de combinar narrativa, ritmo y atmósfera con una madurez poco habitual en el medio. Su dirección artística arriesgada, su identidad sonora envolvente y su capacidad para sumergir al jugador en un universo tan hipnótico como emocional lo han situado en el centro de las conversaciones entre crítica y público.Por todo ello, no resulta exagerado afirmar que Absolum es no solo una de las revelaciones más destacadas de 2025, sino también uno de los firmes candidatos GOTY 2025. Un triunfo rotundo para la creatividad independiente y un recordatorio de que el arte interactivo sigue teniendo la capacidad de sorprender, emocionar y redefinir sus propios límites.