Donkey Kong Country Returns es un videojuego de plataformas desarrollado por Retro Studios y publicado por Nintendo en 2010 para Wii. Posteriormente, en 2013, se lanzó una versión para Nintendo 3DS. En 2014, se lanzó Donkey Kong Country: Tropical Freeze para Wii U (y en 2018 para Switch), con mejoras gráficas y más personajes jugables. Ahora acaba de salir una nueva versión del juego para Nintendo Switch con varias novedades interesantes. Simple y llanamente este juego, junto a Tropical Freeze, se trata de uno de los mejores plataformas 2D de la historia. Cualquier excusa es buena para volver a jugarlo pero, ¿merece la pena en esta ocasión? Después de haber sudado para volverlo a completar al 100% os puedo contar mi opinión.

A grandes rasgos el juego sigue siendo el mismo, la aventura que gran parte de nosotros conocemos. El mayor incentivo de esta versión son los gráficos en Alta Definición. La resolución se ha aumentado y se utilizan mejores texturas. El juego también es más fluído y en una pantalla grande 4K luce mejor que nunca. Si lo jugaste en una Wii en 2010 indudablemente notarás la diferencia.

Uno de las mayores virtudes de DKC Returns reside en un preciso control. Controlar tanto a DK como a Diddy es simplemente una maravilla. Han pasado años desde estos juegos y realmente espero que en Nintendo Switch 2 veamos un nuevo juego protagonizado por ellos. Dicho esto, volvamos al análisis. El juego tiene un montón de divertidos y variados niveles repletos de acción, vagonetas y pantallas con claroscuros y atardeceres que son mis favoritas.

Completar el juego es relativamente fácil. Lo realmente complicado es encontrar las letras KONG y las piezas de puzzle. Si lo hacemos desbloquearemos nuevas pantallas y un mundo extra. Esta versión para Switch incluye un Modo Moderno de juego, en el que tenemos un corazón de vida adicional y podemos comprar un montón de items de ayuda en la tienda de Cranky Kong.

Otra de las virtudes de este juego es la posibilidad de jugarlo en Modo Cooperativo en compañía de un amigo. Es la mejor forma de disfrutar de un plataformas al que se le pueden probar pocas pegas. Quizás la más evidente es la falta de más novedades que incentiven a comprarlo a los que ya lo jugaron en Wii o en 3DS. Dicho esto se trata de un título totalmente imprescindible si no jugaste a ninguna de sus versiones. Un juego repleto de diversión, detalles, buen rollo, saltos precisos, momentos tranquilos de los que enamoran. Una muestra más de que Nintendo Switch tiene uno de los mejores catálogos de la historia de las consolas. Y Xenoblade Chronicles X está a la vuelta de la esquina.

NOTA: 8

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