Nintendo, como todos saben, es una empresa muy comprometida en la lucha contra la piratería. En su última arremetida en esta cruzada han advertido a varios de sus usuarios sobre el uso de un servicio online para su antigua consola Wii-U, precursora de la Nintendo Switch. 

El sistema online al que se refiere es en realidad un grupo de distintos servidores con localizaciones divididas que logró anexar las antiguas consolas Wii-U y la Nintendo 3DS tras el cierre oficial de Nintendo en Abril de 2024.

"Hemos confirmado la existencia de servicios no autroizados que reemplazan las funciones tales del juego online de la Wii-U, las cuales terminaron sus servicios el 9 de Abril de 2024. Por favor, absteneos de usar dichos servicios pues podrían suponer riesgos de seguridad inesperados."

Este fue el mensaje de Nintendo al respecto, y lo cierto es que desde aquel mismo mes, aquellos informáticos se pusieron manos a la obra para continuar dando soporte por su parte a dicho servicio online. Casi un año ha pasado desde entonces y de momento, no han habido reportes sobre riesgos de seguridad de ningun tipo. El catálogo de juegos de ambas consolas tiene algunos títulos exclusivos que no aparecen en la Nintendo Switch, por lo que se perderían para siempre.

Algunos opinan que Nintendo en realidad dejó de dar soporte a dicho servicio con el único propósito de dar más visibilidad a sus nuevos productos, pues Wii U y Nintendo 3DS, como consolas descontinuadas, dejaron de lanzar juegos hace varios años, lo que significa que NO hay ganancias con ellas.

De momento, lo único que puede hacer Nintendo es intentar convencer a los usuarios de dejar de usar la plataforma, pues sin nombres propios o información sobre los perpetradores, no pueden incurrir acciones para cerrar dichos servidores definitivamente. Están atados de manos por ahora.

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