En 1997 el mundo vió una de las adaptaciones animadas mejor hechas de un manga en aquella época, Berserk. No solo tenía un material de origen sólido, sino que además contaba con destellos de calidad en todos los apartados: animación, música, dirección y sobre todo, argumento. Ademas de ello, en ese entonces la serie resultó un éxito, pero tal parece que se durmieron en los laureles. ¿Por qué el anime nunca continuó? Aquí os lo explicamos.

Kentaro Miura sabía que había hecho un excelente trabajo, y por aquel entonces, en 1989, la editorial Animal House también estaba al tanto de que la obra podía crecer mucho más: Tenía una historia de trasfondo y protagonista sumamente interesante. En 1992 Animal House desaparece y el trabajo de edición y distribución queda a cargo de Young Animal. Es aquí cuando se coqueteó con la idea de adaptar lo hecho hasta el momento con un anime, hablamos del primer arco de Berserk, la Edad de Oro y sus aventuras como recluta en la banda del Halcón. Llegaron a un acuerdo con el estudio de animación OLM, Inc pero todo tenía un único fin: un anime que sirviera para promocionar el manga.

El anime, relativamente corto (25 episodios), adaptó con éxito el primer arco de Berserk. Su crudeza, alta violencia y tono lúgubre y melancólico dieron en el clavo con total precisión. El plan inicial dió frutos, para 1997, la cantidad de fans del manga se triplicó y también logró que fuera aun más conocido fuera del país nipón.

Eventualmente coquetearon con la idea de continuar adaptando arcos, pero hubo una negativa por parte de Young Animal a dicha propuesta, uno de los motivos fue que para 1997 había suficiente material como para que la animadora trabajara, pero temía que eventualmente el anime alcanzara al manga en la historia, por lo que bien presionaria a Kentaro Miura a trabajar con prisas o divergir la historia del anime, una idea pésima en la cabeza de todos. Otro motivo fue que, a pesar de que el anime fue un éxito, también sabían que, debido a su categoría Seinen, la cantidad de público sería siempre restringida; sin plataformas online como tenemos ahora, dependía por completo de lo que las cadenas de televisión le ofrecieran: Horarios tardes y muy poco margen de Marketing.

La obra de Muira además contenía temas bastante adultos dificiles de promocionar: Violación, genocidio, un poco de gore, e incluso religión y algo de política.

Entre 1997 y 2000, la competencia estaba durísima con otras obras de mayor público como Pokemon, Evangelion, Initial D, Sakura Card Captors, One Piece, Hunter X Hunter, Rurouni Kenshin, Zoids, Inuyasha, Hayime no Hippo, Vampire Hunter, Yu-Gi-Oh! y un larguísimo etcétera. Decidiendo no tentar a la suerte con tantos red flag, se apegaron al plan inicial: El anime de Berserk era únicamente para promocionar el manga.

La idea de adaptar un anime no se detuvo entonces, recordando la trilogía de películas del año 2015 que adaptaron el mismo arco, pero con una intención similar: acaparar más público para la versión en tinta. Nos quedamos entonces con una versión de tv muy pobre lanzada poco despues de la trilogía de 2015 y un proyecto fan que ya tiene abogados detrás. La idea de adaptar un anime aun no queda descartada, y seguramente la veremos, tarde o temprano. Una obra de tal calibre no puede quedarse unicamente en versiones impresas.

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