Lucasfilm es demandada por usar imagen de Peter Cushing en Rogue One

En 2016 se estrenó Star Wars: Rogue One. Un spinoff que narraba como los rebeldes lograron hacerse con los planos de la estrella de la muerte. Al tratarse de un spinoff ubicado entre el episodio III y IV, la aparición de varios personajes de la primera trilogía era escencial para el guión. El tema es que ya habían pasado 30 años y varios de ellos o bien estaban muertos o demasiado envejecidos: Nos referimos a la princesa Leia y a Grand Moff Tarkin.

Para su recreación se utilizó CGI y los rostros de estos actores volvieron a la vida. Sin embargo, con el caso de este último Moff Tarkin, un amigo cercano del actor insiste en que Disney no tenía permiso para utilizar su imagen. El caso ha sido llevado a tribunales donde Kevin Francis ha demandado a Lucasfilm, el cual intentó desechar el caso el pasado 9 de septiembre, fallando en el intento. El proceso sigue activo.

Segun Francis, él y el actor llegaron a un acuerdo sobre la recración de su imagen en 1993, un año antes de que el actor falleciera. Disney se defendió alegando que no necesitaban de ningun permiso debido al contrato del actor con Lucasfilm en 1977, en el cual le pagaron $37,000  a través del representante del actor para índoles del mismo tipo: reproducción de su rostro en distintos formatos para uso de marketing, merchandising o secuelas cinematográficas.

Las pruebas que ambas partes presentaron tienen valides legal a primera vista, por lo que el juez encargado del caso ha decidido llevar la demanda a un tribunal, se presume que una de las dos partes podría estar mintiendo, pues es inverosimil que el actor haya dado luz verde a dos contratos opuestos y que ambos lleven su firma.